El cine como terapia audiovisual en Honeyboy
El cine siempre ha sido una ventana a la realidad social, mostrándonos vivencias, personajes, historias que ocurren a lo largo de nuestros años o ficciones que vuelan por nuestra mente y que aterrizan sobre el papel por guionistas excepcionales. Por otra parte, es importante reconocer que este arte ha sabido aprovechar sus historias para llevarnos a la reflexión, y para darnos mensajes que van mas allá del texto de un filme. Por eso hoy te presentamos Honeyboy un gran ejercicio sobre ahondar en estos 2 temas.
¿Qué pasa cuándo esta reflexión y catarsis van más hacia la liberación de los traumas del guionista?
La respuesta es que esto, da a luz una obra que considero infravalorada desde el guion, producción, fotografía, hasta las actuaciones de quienes forman parte de la cinta “Honeyboy”. Una película que fue escrita por el periodo de rehabilitación de Shia LaBeouf, quien llevaba sin hablar con su padre por más de 7 años. Tanto rencor, tanto odio y tanto amor pueden verse en la historia de “Honeyboy” como le decía su padre a Shia. En la cinta Shia tomará el nombre de Otis y veremos circunstancialmente dos partes de su vida, cuando es menor (Noah Jupe) y cuando es un adolescente (Lucas Hedges).
Actuaciones conmovedoras y una trama sincera.
El trabajo de Jupe como Otis es realmente conmovedor, es impresionante la habilidad de actuación de este niño, sumando más puntos está la terrible relación que Otis llevaba en ese momento con su padre (protagonizado por Shia) , un veterano de la guerra, adicto a las drogas y en recuperación por alcoholismo que sólo vivía con su hijo por qué le pagaba para cuidarle. En la infancia Otis incluso fue arrojado hacia el consumo de cigarrillo por su propio padre, sufriendo de maltratos verbales y/o físicos, elementos que Jupe logró mostrar majestuosamente en su papel.
En etapa adolescente podemos ver el sufrimiento de Otis en un centro de rehabilitación, pero este se encuentra tratando de mejorar su vida, y buscándole sentido a todo el dolor que cargaba. Dolor que podemos ver en el diálogo con su psicóloga, en que le pide que no trate de borrar de él lo único que le dejó su padre, que era ese dolor. Su padre lo golpeaba y humillaba, esto en un discurso de doble vínculo pues no tenía la mínima idea de cómo ser un buen padre o cómo cuidar de él.
Honeyboy pasó a formar parte de una de las películas más honestas que podrás ver en los últimos años, en eso baso la aceptación y calificación a este filme. Aplaudo el trabajo tan complicado de escribir esta historia sincera de Shia, y aplaudo aún más el trabajo que seguramente costo protagonizar el papel de quien te daño y enseñó tanto. Me pongo de pie por que en la última escena nos regala minutos que debió guardarse para él, y que prefiere compartir para que esa confesión honesta de su vida sirva de catarsis para quiénes cargan con tanto dolor al igual que él un día lo hizo.
Shia: Haré una película de ti.
Padre de Shia: ¿Una película de mí?
Shia: Hazme quedar bien, Honeyboy.
Esta película la puedes encontrar actualmente en el catálogo de Cinepolis Click, o en HBO Max.